En Grupo Cantó contamos con una larga experiencia a nuestras espaldas realizando reformas integrales Alcoy. A lo largo de este tiempo hemos podido ver ciertos patrones que se repiten con frecuencia cuando se contrata este tipo de obras y que suponen errores muy comunes que podrían ser fácilmente evitables.
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No realizar todas las obras necesarias
Uno de los errores más comunes es no realizar todas las obras que hacen falta de una sola vez. Normalmente, esto se hace para ahorrar gastos, pero realmente no es así. Dejar una reforma para más adelante puede suponer encarecer el trabajo ya que habrá que volver a gestionar permisos, lo que supone un gasto de tiempo; volver a coordinar y desplazar profesionales, lo que resulta más caro que utilizarlos una vez que ya están en la obra; quizás volver a contratar contenedores para escombros y así un largo etcétera.
Todo esto sin hablar del trastorno que puede suponer para la familia tener obras en casa cada poco tiempo, las cuales incluso pueden obligar a desplazarse a otra vivienda. Si además se recurre a préstamos bancarios para la realización de los trabajos se acabaría pagando dos veces por gastos de gestión o de apertura de préstamo.
En general no merece la pena dejar trabajos para más adelante y siempre que sea posible se debe de tratar de aglutinar toda la reforma en un solo proyecto.
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Los pequeños detalles son importantes
Cuando se realiza una reforma del hogar a menudo se cae en el error de centrarse demasiado en los aspectos más grandes de la obra, como la distribución de la vivienda o la elección de los materiales y se descuidan demasiado los pequeños detalles.
Todo es importante en una reforma del hogar y todo necesita de un tiempo para que cuando esté hecho el trabajo la vida sea mucho más cómoda y agradable en la casa.
Un ejemplo de esto es que, una vez que se reforma la electricidad de la vivienda, es importante colocar todos los enchufes necesarios. Y, de paso que se pasan los cables eléctricos, instalar en cada habitación una toma de antena, una toma de teléfono y una toma de Internet. También es interesante que las tomas de enchufe incluyan, al menos algunas de ellas, USB para poder recargar teléfonos u otros dispositivos sin ocupar el enchufe.
Estos pequeños detalles se pueden llevar a cabo sin problema cuando se realiza una reforma integral del hogar, no incrementan prácticamente el gasto y se agradecerán cada día porque harán la vida un poco más fácil.
