Comprar una vivienda unifamiliar con un pequeño terreno es el sueño de muchas familias. Pero, hoy más que nunca en que el concepto de familia ha cambiado muchísimo y también sus necesidades, en que el consumidor se ha vuelto más exigente y quiere que cuando compra algo esto sea tal y como lo imaginaba, evitando tener que realizar reformas en una casa nueva, la idea de comprar construcciones sobre plano es la mejor de las opciones.
De hecho, comprar viviendas unifamiliares es seguramente la mejor solución para conseguir la casa soñada ya que dispondrás del terreno donde dejar volar tu imaginación.
Si todavía no tienes claro por qué deberías comprar una casa sobre plano, te contamos los pros y los contras para que puedas elegir con objetividad y estar seguro de haber tomado la mejor decisión posible.
Al comprar sobre plano se consiguen las siguientes ventajas:
- El precio es más barato. Comprar una vivienda en plano, ya sea unifamiliar o piso, supone un ahorro considerable. De hecho, una de las formas de especular que estuvieron de moda antes del pinchazo de la burbuja económica era comprar construcciones en plano para revenderlas una vez acabadas y ganar dinero de esa manera.
- Se pueden realizar las modificaciones que se desees. Al adquirir la vivienda en plano se pueden pactar todos los cambios que se deseen, dentro de las posibilidades arquitectónicas y estructurales de la vivienda. La distribución de las habitaciones, el número de baños, la posibilidad de armarios empotrados y, por supuesto, se pueden elegir los materiales que se utilizarán.
Evidentemente, todo lo que se cambie puede conllevar modificaciones en el precio que también habrá que pactar con el constructor, pero el resultado será una vivienda a la medida, realizada exactamente al gusto del comprador y siguiendo sus especificaciones, algo imposible de conseguir cuando se compra una casa ya terminada.
Puntos en contra de comprar una vivienda sobre plano:
Por supuesto, comprar sobre plano también tienen sus inconvenientes y el comprador tiene que valorar si le merece o no la pena según sus circunstancias. Los inconvenientes principales son dos:
- El plazo de entrega. Evidentemente, la entrega de la vivienda no va a ser inmediata como sí lo es una casa que se compra terminada. El comprador tendrá que empezar a pagar una casa que todavía no tiene a la vez que quizás, está pagando un alquiler por la vivienda en la que reside.
- Las quiebras. En alguna ocasión ha sucedido que tras comprar viviendas en plano el constructor ha quebrado y las personas se encuentran con una hipoteca que pagar pero sin vivienda. Los trámites y juicios a los que han que enfrentarse en estos casos son realmente engorrosos. Pero este inconveniente es sencillo de prevenir, confiando en constructores sólidos, con un nombre y un prestigio.
Por estas razones, contar con constructores como nuestra empresa, con tantos años de experiencia, es el mejor aval que deberías buscar. Una empresa de confianza con grandes proyectos a su espalda dispuestos a conseguir ofrecerte el hogar que realmente necesitas.