En las reformas también hay modas y tendencias y por eso vamos a analizar qué es lo que se llevará en reformas en este año que estamos estrenando a juzgar por lo que estamos viendo en las revistas de decoración y en las ofertas de las casas de nueva construcción.
Se incorporan nuevas estancias en el hogar, al menos para lo que son las reformas habituales en apartamentos y también se recuperan elementos que parecía que iban a ser cosa del pasado en muy poco tiempo. Los materiales también cambian tal como vamos a ver en este pequeño repaso resumen que haremos a continuación para analizar qué nos espera en el año 2019.
La cocina y el baño siguen siendo reformas estrella, pero algo ha cambiado
Las reformas de la cocina y el baño seguirán siendo las reformas estrella en el 2019 pero se está notando un cambio en las tendencias. Si hace unos años todo el mundo se deshacía de la bañera para poner una ducha, esto ya no es necesariamente así y a no ser que se trate de personas mayores que no pueden usar la bañera, esta está comenzando a recuperar protagonismo sobre todo cuando hay más de un cuarto de baño en casa.
Parece que nos hemos reconciliado con el placer del baño y que no solo no queremos quitar la bañera, sino que no nos importa invertir un poco más en una con hidromasaje o con formas más ergonómicas para disfrutar al máximo de la experiencia del agua en el hogar. Seguramente, la moda de los spas ha tenido mucho que ver en este reencuentro con la bañera.
En cuanto a la cocina, además de darle mucha importancia al diseño y a los muebles, cada vez se exigen más los electrodomésticos de bajo consumo, que aportan un plus de calidad y de economía a medio y a largo plazo.
Las nuevas tendencias en suelos
Las tendencias en lo que respeta a los suelos también han cambiado. Ya no se llevan las tarimas sintéticas, sino que se prefieren las tarimas de madera natural, al menos en los dormitorios. En el salón se puede escoger entre la madera o, si se quiere un diseño vintage de porcelana. Los suelos de porcelana vuelven a estar de moda para sala de estar y comedor como segunda opción tras la madera y para muchos resultan mucho más decorativos y originales para estas estancias en las que, al haber alfombras casi todo el año, no es tan importante colocar un suelo tan cálido.
En suelos de porcelana además de los diseños vintage se llevan los diseños geométricos. En cuanto a los suelos de madera, se llevan los tablones anchos, los tonos oscuros y también los diseños en espiga, aunque una versión mucho más moderna de la que se llevaba hace algunas décadas.
Los espacios abiertos ¿siguen siendo tendencia?
Los espacios abiertos hicieron furor en la última década pero ahora muchas familias se los están planteando, sobre todo cuando se vive en un apartamento. Tener un gran espacio que es cocina, comedor y sala de estar puede dar sensación de amplitud pero también hace perder intimidad a la familia. Si alguien está viendo la televisión y hay gente charlando en la isla de la cocina se van a entorpecer mutuamente y además, los olores de la comida con frecuencia acaban impregnando sofás y cortinas.
Por eso, los espacios abiertos se están reservando para las casas individuales que tienen un mayor tamaño y ofrecen otras posibilidades y en los apartamentos se vuelve a apostar por espacios separados, al menos para la cocina.
Si se optó por la unión en el pasado una buena manera de conseguir intimidad nuevamente sin tener que levantar un tabique es utilizando puertas correderas que puedan separar los ambientes dependiendo del momento. Las ventanas correderas sobre la isla es otra alternativa para no tener que quitarla y poder aprovecharla cuando sea necesario.
El vestidor, el nuevo sueño en muchos hogares
Hasta hace pocos años encontrar una vivienda con vestidor no era posible a no ser que nos fuésemos a casas o apartamentos de gama alta o medio alta. Pero hoy las familias han cambiado y ya no es normal que en un hogar haya más de dos hijos. Por eso, muchas viviendas que ya tienen varias décadas a sus espaldas y que estaban pensadas para familias más numerosas cuentan con espacio suficiente para incluir no un armario empotrado, sino un vestidor en la habitación principal.
Para este fin se puede utilizar una habitación pequeña que muchas veces se usaba como sala adicional, cuarto de lectura o habitación de invitados y transformarla en un vestidor ya sea usando su totalidad o una parte y donando la otra parte al salón o a otro dormitorio.